Muro, losa, techo y revestimientos forman la completa solución constructiva de Hormigón Armado Aislado, un innovador sistema desarrollado en Chile por Exacta, en alianza con Aislapol, y que fue presentada a arquitectos, empresas constructoras e inmobiliarias en el Auditorio de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Católica.
Se trata de una solución 3 en 1, que une albañilería, estructura y aislación, es decir, la obra queda aislada al mismo tiempo en que se arma la albañilería estructural, permitiendo una construcción ecológica, eficiente y con amplia libertad de diseño.
El Hormigón Armado Aislado está conformadlo por ladrillos livianos de poliestireno expandido (EPS) que se rellenan de hormigón armado para la fabricación de muros soportantes in situ, permitiendo que el ladrillo quede incorporado a la estructura, aportando aislación térmica y acústica a la edificación, disminuyendo el plazo de construcción de una obra y aumentando la velocidad de montaje.
Asimismo, tiene gran resistencia a los sismos. Tras el terremoto del 27 de febrero pasado y luego de verificar las viviendas construidas en las regiones de Valparaíso, O’higgins, del Maule, Bío Bío, de la Araucanía y Metropolitana, se constató que no hubo daño estructural, que la estructura quedó intacta, no presentó daño alguno en los revestimientos, ni en los vidrios de las ventanas, ni en otros similares.
“En el año 2007, cuando sufrimos el terremoto de Tocopilla grado 7,7 en la escala Richter, había más de 180 viviendas utilizando nuestro sistema en la zona afectada, las cuales demostraron un excelente comportamiento sísmico. Ahora, luego del terremoto grado 8,8 y sus réplicas, verificamos que las construcciones se comportaron extraordinariamente bien, dado que su estructura de hormigón armado es más flexible que un muro de hormigón tradicional y más sólida que cualquier albañilería”, señala Sebastián Goldberger, Gerente General de Exacta.

Características
Es una solución integral que une albañilería, estructura y aislación, dejando la obra aislada a la vez en que se arma la albañilería estructural.
Lo anterior, permite disminuir los plazos constructivos de una obra. Por ejemplo, en 10 días se puede levantar una obra que con otros sistemas se realizaría en 16 días. Esto es, obra gruesa terminada considerando el revestimiento exterior e incluyendo las fundaciones (viga de fundación y radier) en un modelo de vivienda tipo de entre 45 y 50 m2.
Además, la velocidad de montaje es de entre un 50% y 70% más rápido, la logística es sencilla, es fácil de manipular y transportar producto de que los materiales son livianos, reduciendo además los accidentes de trabajo, no se necesita mano de obra especializada, solo genera un 2% de desperdicio, y se puede construir en cualquier zona del país y bajo cualquier condición climática.
“Finalmente, es importante destacar que se puede lograr un ahorro de hasta un 70% en el consumo energético de una construcción, ya sea para calefaccionar o enfriar una vivienda”, agrega Sebastián Goldberger.

Tecnología
Este sistema constructivo nació hace más de 30 años en Alemania y a partir de los buenos resultados obtenidos, se comenzó a masificar. De hecho en variados países de Europa y en Estados Unidos es una solución ampliamente conocida y se han construido más de un millón de viviendas. A Chile llegó en el año 2005 de la mano de la empresa Exacta y gracias a una alianza estratégica con Aislapol. Exacta además tiene una filial en Argentina desde hace 20 años, entregando estas mismas soluciones en el país vecino.
En Chile, se han construido más de 40 mil m2 a lo largo del país, entre barrios de viviendas, colegios, casas particulares, piscinas y subterráneos. Actualmente, se está construyendo un hotel cinco estrellas de 5.500 m2 de superficie en la zona de Chacayes, en la VI Región.